viernes, 12 de junio de 2015

Dos Diablos en el Corazón (Peña Ruaba)

La idea de abrir esta nueva vía en Peña Ruaba fue de nuestro amigo Manrique Pérez. Y como no hace falta que nos insistan mucho para "meternos en faena", aceptamos encantados ayudarle. El material del equipamiento se lo debemos agradecer a él.

El objetivo era hacer una ruta con una dificultad moderada, que permitiera disfrutar a un amplio espectro de escaladores. El estilo ha sido el habitual en nuestras aperturas: largos bien equipados con paraboles de 10 mm. (incluso en los tramos más fáciles), argollas en todas las reuniones y limpieza a fondo de la vía.

La aproximación desde el coche es de unos 30 minutos. Seguir el camino de la Ferrata durante unos 20-25 minutos y subir hacía la pared por un sendero en diagonal señalizado con algún hito. El inicio está a unos 20 metros de la vía "Los Terceros también existen", y está marcado con una flecha en la pared.


Hasta la cima del Mallo de la Mora han salido siete largos, de los cuales el último coincide en gran parte con la vía "Los Terceros también existen" (solo los dos primeros paraboles de esta tirada son propios de nuestra vía). Todos los largos son bonitos. La roca es muy buena en los cuatro primeros, y en los dos últimos hemos hecho una buena limpieza para poder escalar con seguridad. En algún tramo puede que haya tierra hasta que se limpie con la lluvia o el paso de las cordadas.


Se puede descender por la propia vía en cuatros rapeles (con cuerdas de 60 metros). Si optamos por esta opción, es mejor no subir hasta la cima y bajar desde la R6:
  • De R6 a R4
  • De R4 a R3
  • De R3 a R2 (o a R1)
  • De R2 (o R1) al suelo.
Pero para evitar posibles caídas de piedras a otros escaladores que estén en la misma vía o en la "Santi Sagaste" (que está a la derecha), recomendamos bajar andando. Para ello hay dos opciones desde la cima:
  • Subir un poco hacía el Macizo para alcanzar la parte superior de la Ferrata.
  • Descender por la canal que empieza desde el pequeño collado que hay detrás de la cima (hay algunos tramos con cadena o cuerda fija, pero también zonas de destrepe "a pelo"), para juntarse con la Ferrata a mitad de esta. Esta variante es un poco más rápida, pero hay que descender con más precaución. Está previsto colocar alguna cuerda fija más.
Creemos que ha quedado una vía muy atractiva para el que busque hacer una escalada divertida y sin grandes compromisos. El largo "estrella" es el quinto, pues es más vertical y aún te hace escalar. Esperamos que os guste.

martes, 9 de junio de 2015

Accesorios útiles (Apuntes Técnicos)

Hoy vamos a tratar de esos útiles y accesorios que pueden sacarnos de un atolladero o incluso salvarnos la vida. 


Cintas y cordinos: Es recomendable incluir en nuestro material una cinta o cordino largo (180 cm es lo más indicado) para una triangulación de tres o más seguros, rodear un pitón de roca, etc. Es aconsejable también llevar cordinos de varios tamaños y diámetros para cambiar un rapel, puentes de roca, nudos de bloqueo prusik o machard, etc. Un anillo de cinta de las de antes (de 2 cm de ancho) nos puede ayudar a improvisar un estribo (se clava menos que las cintas estrechas actuales)


Tibloc: Después de varios años, cada vez te das más cuenta de su utilidad y en cuántas ocasiones te hubiese venido bien. Ahí van algunos posibles usos:
  • ¿A quién no se le han atascado unas cuerdas de rapel o enredado en una rama traicionera? Tirando a mano, incluso dos personas, muchas veces no salen; sin embargo con la ayuda del  tibloc, la cosa cambia radicalmente.
  • Si después de una caída te quedas bajo un desplome, te facilitará enormemente volver al punto de partida.
  • Maniobrar para izar una mochila o petate.
  • Maniobras más complejas de rescate. 

El gancho: No es un elemento imprescindible, pero según en qué tipo de vías te metas te pueden sacar de un apuro; un seguro que falta, un paso que se te resiste, etc. Los hay de múltiples formas y características, con más o menos radio de curva, flexibles, tipo trípode, etc. Uno de radio medio y que sea sólido, puede ser el más polivalente si solo llevas uno. Da un poco de "yuyu" colgarse, pero te sorprendes de lo bien que quedan, a veces.


Guantes: Otro elemento mucho más que útil, tanto para asegurar en dinámico (yo he visto quemarse los dedos al detener una caída) como para rapelar. Y, ¿cuántas veces no los echamos en falta ante un cambio brusco de tiempo, cuando las manos se te quedan insensibles por el frío? También nos pueden servir en aproximaciones o descensos con ramas y pinchos. Pesan poco y son agradecidos.


Protector solar/labial y esparadrapo: Actualmente hay protectores que hacen doble función, sirven tanto para la cara o brazos, como para los labios. Las quemaduras, además del peligro que suponen a largo plazo para la piel, te pueden estropear una salida de varios días.
No olvidar también un rollo de esparadrado, preferiblemente el clásico de tela y que pegue bien. Lo podemos usar para infinidad de situaciones: Lesión de un dedo, torcedura de un tobillo, apaño provisional de una herida, rotura de una prenda, fabricar una cinta "tramposa" de fortuna, etc.


Lampara frontal y silbato: Cuántas veces nos habremos acordado de él cuando el horario de una vía se nos ha ido al "traste" y hemos tenido que bajar (eso si hemos podido y no nos hemos comido un vivac) medio a tientas y tropezando. 
Un silbato, parece una tontería, pero si se levanta el viento y no te oyes con tu compañero, con haber establecido un simple código, sabrás cuando esta en la reunión y si ya puedes subir.  Ante una situación de rescate y niebla, también puede hacer un papel imprescindible. Ya hay muchos fabricantes que lo incorporan en el cierre de pecho de mochilas de pared.


Navaja: Otro elemento inseparable. Da lo mismo si es de diseño "chic" o tradicional, de las minis o normalita, de corte aserrado o no, pero sobre todo que esté bien afilada. Aparte de cortar cordinos, puede servir para otros usos, como puede ser quitarte un pincho metido en un dedo.


Maillón o mosquetón de abandono: Fundamental para abandonos o para que corra bien la cuerda en un rapel. No seáis cutres y llevar maillones decentes, no de los de la "Señorita Pepis" o comprados en el "Chino", cuya resistencia es una incógnita. También podemos usar mosquetones antiguos de seguro, o sin seguro bloqueados con un trozo de esparadrapo.


Chapa recuperable o sirga lazo:  Muy útil en todo tipo de vías, incluso en las equipadas con paraboles. Nos puede sacar de un apuro cuando nos encontramos con un buril que tiene la chapa rota (o simplemente que nunca la tuvo), o cuándo un ladrón o "talibán" de la escalada ha decidido llevarse la chapa de un parabolt.

La lista la podríamos ampliar con más elementos: una manta de supervivencia, un pequeño botiquín (con calmantes, antiinflamatorios, puntos de sutura adhesivos, etc.), un cortauñas, un teléfono móvil, un cortavientos, etc. No todo lo descrito es necesario subírselo a todas nuestras escaladas. Que cada uno, en función de la vía en la que vaya a meterse, decida qué es lo aconsejable; pero más vale "pecar" de prudente, que lamentarse después por no haber cogido algo que nos podría sacar de un apuro.

Buenas escaladas y hasta la próxima.

Os Diaples